martes, 3 de febrero de 2015

El suelo

Llamamos suelo a la parte más externa de la corteza terrestre, resultante de la meteorización de las rocas subyacentes y con unas características claramente diferenciadas de las mismas. Podemos considerar el suelo como un sistema de
interacción entre tres fases bien definidas: una fase sólida, constituida por materia mineral y orgánica, una fase líquida, y una fase gaseosa o atmósfera del suelo. 

Tomado de: https://florayfauna.files.wordpress.com/2007/08/suelo32.jpg
El tipo y composición de la materia mineral viene dado por las características de las rocas del subsuelo, así como de los procesos edáficos que hayan tenido lugar en su formación. La porción inorgánica es muy importante por su influencia en la disponibilidad de nutrientes, aireación, retención de agua, etc. La materia orgánica procede de la actividad de los distintos organismos vivos del suelo y su composición y cantidad es variable, principalmente en función del tipo de cubierta vegetal. El resto del volumen del suelo está prácticamente constituido por espacios porosos, que a su vez están ocupados por agua y los gases que constituyen la atmósfera edáfica. La porosidad (cantidad y tamaño de los poros)
depende de la textura, determinada por la cantidad de arena, limo y arcilla, la estructura y el contenido en materia orgánica.
Todos estos factores determinan a su vez el movimiento y capacidad de retención de agua del suelo y la composición gaseosa de su atmósfera. De forma característica la atmósfera del suelo se encuentra enriquecida en dióxido de carbono y empobrecida en oxígeno, como resultado de la respiración aeróbica de raíces de plantas, animales y microorganismos. Sin embargo, cuando se producen condiciones de anaerobiosis (p.e. por acumulación de agua en los poros del suelo) aparecen en la atmósfera del suelo otros gases como óxido nitroso, nitrógeno gaseoso y metano, resultantes de actividad respiratoria
anaeróbica bacteriana. Tanto el contenido en agua como la composición de la atmósfera del suelo son factores que fluctúan ampliamente.


Propiedades Biológicas del Suelo

Las propiedades biológicas están asociadas a la presencia de materia orgánica y de formas de vida animal, tales como microorganismos, lombrices e insectos que contribuyen a definir su capacidad de uso y su erodabilidad. En buen estado, un suelo contiene mil millones de microorganismos por gramo. 

Estas propiedades son muy importantes, ya que el suelo está constituido por la microfauna del suelo, como hongos, bacterias, nematodos, insectos y lombrices, los cuales mejoran las condiciones del suelo acelerando la descomposición y mineralización de la materia orgánica, además que entre ellos ocurren procesos de antagonismo o sinergia que permite un balance entre poblaciones dañinas y benéficas que disminuyen los ataques de plagas a las plantas.
La fauna y flora edáfica tienen una importancia básica en la recuperación de la funcionalidad y la fertilidad del suelo, constituyen la fracción viva del suelo y la mayor parte de sus propiedades no pueden explicarse sin contar con su intervención, por lo que deberemos conocer mejor su composición y funciones con el objeto de adecuar nuestro manejo agrícola a sus características y necesidades vitales.

Tomada de: http://www.chacabuconoticias.com.ar/wp-content/
uploads/2014/07/tierra.jpg
Según su tamaño la biología del suelo se presenta como:

  • Macroorganismos Vegetales
  • Macroflora
  • Microfauna y Mesofauna
  • Microflora





Macroorganismos del Suelo

Pertenecen a los dos reinos, el vegetal y el animal.



Macroorganismos Vegetales


Los macroorganismos vegetales del suelo son sencillamente las raíces de las plantas.

*Las raíces de las plantas:
Tomada de: http://blogs.21rs.es/silviamelero/
files/2013/01/arbol-raices.jpg
Las raíces son generalmente bastante más voluminosas que las partes aéreas. Son, sin embargo, bastante menos conocidas porque no son tan fácilmente accesibles a la observación al desarrollarse en ese medio opaco que es el suelo. Mientras las plantas están en el suelo es imposible separar todo el sistema radical porque la cabellera de raíces, que evoluciona en ese medio aparentemente duro que es el suelo, es extremadamente frágil. Armándose de paciencia se puede cavar una fosa alrededor de una planta y salvar algunas raíces. Entonces nos sorprenderemos al ver que cada planta tiene un sistema diferente por ejemplo un irigo puede enraizar más profundamente que una encina y que una alfalfa puede enviar su raíz pivotante en busca de agua a más de diez metros de profundidad.
Sin embargo, aunque las raíces proveedoras de agua puedan hundirse muy profundamente su masa es reducida con relación a la de la nutritiva que se desarrolla en el horizonte B, donde se mezclan el humus y la arcilla. En este medio, la cabellera radical puede absorber los elementos nutritivos solubilizados por los microorganismos. En cambio segrega las exudaciones radicales, ricas en carbono que nutren a ciertos microbios del suelo. A la muerte de la planta, las raíces se descompondrán y formarán parte de nuevo de la materia orgánica. Las galerias formadas por el paso de las raíces servirán entonces para el paso del agua y de la circulación de los gases.




Macrofauna

Tomado de: http://3.bp.blogspot.com/-tt5qYbPwCk4/UxwUUaXlH0I/
AAAAAAAAAEY/eury19g6IgM/s1600/kasdhbifbv.png

La macrofauna del suelo se trata de todos los animales visibles del suelo que pertenecen a cuatro grupos extremadamente diferentes: mamíferos, artrópodos, moluscos y lombrices de tierra.

Los mamíferos del suelo pueden ser roedores como los ratones o insectívoros como los topos.

Los artrópodos del suelo pertenecen a todos los grupos: crustáceos (cochinillas), arácnidos (arañas y ácaros), miriápodos (ciempiés e insectos), colémbolos. Su acción fundamental es trocear la materia orgánica que cae al suelo y producir con sus excrementos un soporte adecuado a la vida microbiana.

Los moluscos del suelo son variados en sus formas (babosas y caracoles) y en sus tamaños. Su papel es el de comer la materia orgánica, como hacen las lombrices de tierra.

Tomada de: https://d3tixod1wp885b.cloudfront.net/e8/
457d8a61d51f52e29b2a4fdfe82699/earthworms.jpg
las lombrices de tierra. Su número puede ser considerable: más de diez millones por hectárea, lo que puede representar más de dos toneladas de lombrices. Sus acciones sobre el suelo son de dos clases: mecánicas y químicas. Del primer tipo son las galerías que excavan en gran número, aireando los suelos en todos los sentidos. Algunas especies circulan principalmente en horizontal, otras, salen durante la noche a buscarlos restos vegetales que introducen en sus galerías. 
Este papel de mezcla y transferencia de horizontes es importante. Al mezclar la tierra y la materia orgánica en sus intestinos, las lombrices mejoran la fertilidad de los suelos. La tierra retiene mejor el agua, es más resistente a la erosión, contiene más elementos nutritivos para las plantas y se hace más permeable a las raíces que cruzan las galerías de las lombrices cuyas paredes húmedas son ricas en microbios y en materia



Microfauna y Mesofauna

Microfauna y Mesofauna


La microfauna se refiere a las formas de vida animal de ancho menor a 0.1 mm, por su parte se conoce como mesofauna a aquellos animales cuyo ancho está entre 0.1 y 2 mm. La microfauna incluye principalmente protozoarios, nemátodos y rotíferos. Por su abundancia en el suelo, se hará énfasis en los dos primeros. El principal papel de la microfauna  en el suelo es la disgregación de la materia orgánica y la diseminación de la microflora.

Protozoos
Tomada de: http://www.duiops.net/seresvivos/galeria/
bacteriasproto/1768.jpg
Los protozoos son organismos unicelulares, es la forma más sencilla de vida animal. Fisiológicamente pueden ser masas de mero protoplasma o algunos con un desarrollo mayor, exhiben cubiertas silíceas o quitinosas y morfológicamente pueden dividirse en tres grupos; que en un orden de mayor a menor abundancia en los suelos  son  flagelados, amibas y ciliados. Los protozoos son los animales de la microfauna más abundantes en los suelos (1000000 de protozoos de todas las clases por gramo de suelo seco), su presencia en el mismo está condicionada por factores como la aireación y la provisión de alimentos.

Los protozoos flagelados predominan en suelos ácidos y bien ventilados, son susceptibles a altas temperaturas y baja humedad. El impacto principal de la función que desempeñan los protozoos en el suelo, se ve reflejado en la disminución de la población bacteriana, además interfiere indirectamente en el crecimiento de plantas superiores, ya que la ingestión de bacterias con la asimilación de nutrientes vegetales  pone en riesgo la disponibilidad de los mismos para que sean aprovechados por las plantas , también contribuyen a la descomposición de la materia orgánica en el suelo y al coexistir con bacterias metanogénicas se produce gas metano como resultado de la actividad de dichas bacterias sobre los productos de desecho de los protozoos.
Protozoos


Nemátodos
Son unos gusanos redondos o cilíndricos que pueden ser o no visibles al ojo humano, en general microscópicos en forma de hilos, se encuentran frecuentemente en casi todos los suelos, con una distribución espacial media de 50 nemátodos por gramo de suelo seco.  Son el grupo animal más abundante en el suelo, después de los protozoos. Suelen encontrarse en los primeros 10 a 15 centímetros del suelo (hacia abajo), predominando en ambientes húmedos y orgánicos donde el pH es neutro y en la rizosfera; es decir, cerca de las raíces de las plantas. 
Muchos nematodos se alimentan de materia orgánica en descomposición, de elementos de la microflora del suelo y posiblemente de protozoarios. Varios son depredadores de otros organismos del  suelo convirtiéndose en importantes reguladores de la población bacteriana del suelo y en importantes indicadores de la disponibilidad y contenido de materia orgánica en el mismo.


Rotíferos
Son animales de la microfauna que viven en suelos con altos contenidos de humedad; es decir, tierras encharcadas; se caracterizan por que su parte anterior está modificada en una especie de de disco retráctil que lleva una circunferencia de cilios móviles (de ahí su nombre). Los rotíferos participan en el ciclo de disgregación orgánica, en especial en las turberas y lugares pantanosos de suelos minerales.

Microflora

Los microorganismos son menos visibles y palpables que los demás organismos vivos que habitan el suelo y son ellos, en última instancia, los responsables de mantener el caldo vivo del suelo, con sus infinitas y estrechas relaciones entre ellos. Este mundo vivo lo constituyen principalmente amebas, bacterias, hongos, actinomicetos y algas, sin los cuales el origen y la perpetuación de la vida en la Tierra serían imposibles.

  • Bacterias

Son seres unicelulares y del tipo procariótico, se multiplican alargándose y dividiéndose en dos partes, algunas  pueden entrar en un periodo vegetativo o de latencia; formando esporas. Las bacterias son microorganismos que su longitud varía desde el tamaño medio de las partículas de arcilla hasta 4 o 5 micras, se presentan en diferentes formas que varías desde redondas, bacilares o espiriladas, sin embargo en el suelo predominan en forma de bacilos, formando esteras, masas amorfas o filamentosas denominadas colonias alrededor o sobre las partículas de suelo.


Tomada de: http://www.profesorenlinea.cl/imagenciencias/bacteria025.jpg

Influencia en el suelo
Las bacterias participan en las múltiples transacciones orgánicas que se dan el suelo,  permitiendo así que las plantas y otros organismos se suplan de nutrientes inorgánicos tales como nitrógeno y fósforo, sumado a esto influyen sobre la humedad y capacidad buffer del suelo, fijan en el suelo el nitrógeno atmosférico  y participan en algunas transformaciones enzimáticas fundamentales como son la nitrificación y oxidación del azufre. Es importante saber que existen bacterias a las que se les ha asociado como agentes de control biológico en el suelo, puesto que en su proceso metabólico originan sustancias que inhiben la actividad de otros microorganismos  patógenos, del suelo, dando lugar a una protección radicular en las plantas superiores. Existen también bacterias como Bacillus subtilis que por la producción de un polisacárido que mejora la estructura del suelo, disminuyendo así el efecto erosivo de las gotas de lluvia.


  • Algas
Organismos fotoautótrofos importantes en el proceso de colonización del material  parental. Ellas inician el proceso de formación de suelo. Además, en suelos ya formados, son una fuente importante de materia orgánica.

Las algas no tienen incidencia en la mineralización de la materia orgánica, pero son organismos productores y, en muchos casos, fijadores de nitrógeno atmosférico. En la superficie, su número puede oscilar entre 100.000 y 800.000 por gramo de suelo (JORDÁN L., 2006). Generalmente se clasifican en tres grandes grupos: Verdes-azuladas, Verdes y Diatomeas.

La participación de las algas en las propiedades físicas de los suelos, se deben a que contribuyen en la formación de los agregados así como también en la aireación al liberar oxigeno como producto de su fotosíntesis, y en las propiedades químicas se debe al aporte de su propia composición (Nitrógeno inorgánico, carbono orgánico y fósforo). 

  • Hongos
Son organismos que participan activamente en la descomposición del litter (capa superficial donde se encuentran los residuos vegetales frescos) en los suelos ácidos y en la humificación en ellos; son heterótrofos, generalmente aerobios y muy eficientes en la descomposición de compuestos resistentes a las bacterias, como celulosa, hemicelulosa, lignina, grasas y almidones. Puede existir hasta un millón de microorganismos de este tipo por gramo de suelo.

Tomada de: http://www.todoavatar.com/wp-content/uploads/
2010/09/25psbgg.jpg

Se dividen en levaduras, setas y mohos, las dos últimas son las más importantes en el suelo, las cuales participan en las transformaciones de los constituyentes del suelo. Los hongos no contienen clorofila, por ello dependen de la materia orgánica del suelo.

Los hongos juegan un importante papel en la nutrición de las plantas, porque forman asociaciones con sus raíces llamadas micorrizas, por lo menos en el 85% de las plantas se presentan asociaciones micorrícicas; además, compiten activamente con la planta por nitratos y amonio. El micelio (masa de hifas que constituye el cuerpo vegetativo de un hongo) de algunos de ellos puede causar hidrofobicidad en el suelo. Son abundantes las especies fitopatógenas.



  • Actinomicetes
Organismos muy activos en la descomposición de celulosa y de otros compuestos orgánicos más resistentes y complejos del suelo, por lo cual son importantes en la humificación de la materia orgánica; son aerobios y de gran importancia en relación con la disolución de la materia orgánica del suelo y la liberación de nutrientes de ella. Los Actinomicetos son bacterias filamentosas comunes en suelos neutros a alcalinos, bien drenados.

Algunos actinomicetos secretan sustancias probióticas o antibióticas al medio. Otros son parásitos de plantas superiores. En un gramo de suelo pueden existir entre 15 y 20 millones de hongos actinomicetos.

En la base de la clasificación ocupan una posición intermedia entre los mohos (hongos) y las bacterias. Los actinomicetos se desarrollan mejor en la humedad y en un suelo bien aireado, además son sensibles a las condiciones de acidez del suelo, estando su desarrollo optimo entre 6,0 y 7,5 de pH.